Semillas de girasol para pájaros

Los pájaros silvestres se alimentan de semillas esparcidas por el jardín; son unos actores principales de la biodiversidad y unos aliados de los jardineros. Una alimentación adecuada les asegura la supervivencia y la descendencia de estas especies comunes.

Las semillas y bayas son esenciales para el equilibrio nutricional de las aves de jardín. Las semillas de girasol, ya sean estriadas o sin cáscara, son muy ricas en fibra, vitaminas B y E, hidratos de carbono, minerales y proteínas. Muy populares entre las aves paseriformes o pájaros cantores, les ayudan a termorregular sus plumas gracias al aceite natural que contiene. Para completar ssu beneficios nutritivos, conviene darles también otras semillas, y mejor si son de buena calidad. Para que se acerquen los pájaros silvestres, tu jardín o balcón debe ser un reflejo de la naturaleza, con diferentes comederos y lugares, para evitar la rivalidad entre los pájaros. La diversidad de semillas favorece la llegada de muchas especies.

Los beneficios de la alimentación son muchos. Algunas semillas animarán a los pájaros cantores a colonizar los parques y jardines. Según la región, el lugar, la ciudad o el país, el suministro de alimentos específicos es decisivo para mantener una población de aves. El placer de observarlos, las temperaturas bajo cero del invierno, las sucesivas sequías de los veranos abrasadores, son elementos que sostienen a estas especies en peligro de extinción.

Las semillas de cardo o de cártamo, a menudo ofrecidas a los periquitos, son apreciadas por los camachuelos y las aves que se alimentan en el suelo, como los gorriones, pinzones, verderones o jilgueros. Su sabor amargo aleja a las pequeñas plagas. Las semillas de níspero son ricas en grasas y proteínas, y son populares entre los verderones y los jilgueros. El alpiste, la avena pelada, el mijo amarillo y japonés, las semillas de cáñamo, el trigo sarraceno y las semillas de lino favorecen la presencia de los pájaros cantores en tu jardín.