Láser para gatos

¿Alguna vez has pensado en jugar con tu gato con un juguete con el que nunca se canse? Todo el mundo ha visto lo aficionados que son los gatos al láser, tanto que a veces es difícil evitar que persigan a esta pequeña bestia imaginaria. Para ellos, la luz de un láser evoca una pequeña presa que suelen cazar en el jardín o en el granero. Y como es solo un rayo de luz, tienes mucho tiempo antes de que el gato se dé cuenta de que no podrá atraparlo.

Los gatos son mascotas que siguen teniendo el alma de  depredadores incluso siendo domésticos por lo que necesitan desahogarse, perseguir ratones, incluso si son de peluche. Los gatos han sido domesticados durante más de 10,000 años y han sido uno de los mejores amigos del hombre, sin embargo, nunca olvidan la alegría de cazar. Un láser para gatos es ideal para permitir que tu gato juegue y recuperar su instinto cazador. Incluso te hará reír con sus payasadas y técnicas de caza ancestrales. ¿Qué podría ser más divertido y conmovedor que ver a tu gato correr tras la diminuta luz láser? Y este juguete permitirá a tu gato hacer ejercicio tanto física como mentalmente. Para tener un gato sano tiene que correr y saltar. 

Hay dos tipos de láseres para gatos. El primero, el más conocido, es un pequeño puntero láser manual que te permite jugar directamente con tu mascota. El otro tipo es un láser interactivo, que tiene la forma de una pequeña torre. La luz se proyecta automáticamente por la habitación. Los gatos no dejan de jugar con un láser, por lo que esta es la mejor manera de mantenerlos ocupados indefinidamente. Los precios entre estos dos juguetes son un poco diferentes, pero para saber cuál elegir, depende de si prefieres usar un láser por tu cuenta o dejar que tu gato se divierta solo.

Hace unos años, el láser adquirió mala reputación por el posible daño que pueden causar a la retina de un gato. Sin embargo, si se usa correctamente, no hay nada peligroso en jugar con un puntero láser. Las instrucciones de seguridad son sencillas pero hay que respetarlas escrupulosamente: basta con no apuntar nunca con el láser a los ojos de tu felino, para evitar que la luz entre en contacto directo con sus ojos. Este juguete debe usarse solo en casa, en la calle podrías molestar a otras personas.